Crisis de la media mediana edad...

Oh! mi querido Blog mi olvidado Blog! debería cambiarte el nombre de diarios de vida a diarios de decepciones, desencantos y problemas de vida! Al parecer el año 2010 no es un buen año , y no solo en mi caso , veo que mucha gente está sumida en problemas tanto físicos como mentales, económicos y espirituales. Muchos estamos en el mundo el día de hoy preguntándonos... quién soy? porqué estoy aquí? en mis casi 20 años de vida he hecho algún tipo de diferencia o siquiera hecho algo productivo a cambio de la vida que se me ha otorgado? No tengo la respuesta. Me veo sumida en el día a día tratando de contestar las preguntas que he nombrado "los cuestionamientos de la crisis de la media mediana edad" (véase y aunque usted mi querido lector no lo crea, los problemas de cumplir 20 años de edad ).
Pueden reírse si quieren, y pensar: ¿Qué clase de problemas puede tener alguien que cumple 20 años!? Pues la respuesta es fácil: Muchos. En mi caso es el verdadero paso de la niñez y adolescencia a la adultez y es el momento en el que una persona realmente debe decidir qué es lo que será en la vida y si todo lo que ha hecho hasta ahora tiene alguna relevancia. Es el momento de tomar realmente responsabilidad por la existencia propia y decidir que clase de persona realmente seremos en esta nueva década de vida.

Han pasado meses desde la última vez que escribí... La vida da vueltas inesperadas y te lleva a lugares a los que nunca imaginaste llegarías.. Lugares obscuros, solitarios, lugares extraños. Desearía poder decir que después de los últimos dos años de mi vida sigo siendo esa niña dulce, ingenua, soñadora y buena de corazón que una vez fui... Pero no puedo. La vida es cruel y te despoja de muchas cosas: te hace crecer. Pero quiero creer que voy a lograr mi mayor cometido, el cual me ha acompañado desde hace ya unos años, y es el de lograr conservar mi felicidad infantil. No hay nada más bello que sonreír por algo tan simple como que el sol se descubre entre las nubes, o porque un pajarillo canta en nuestra ventana; No hay nada más hermoso que reír y emocionarse por visitar Disney aunque tengas cuarenta y tantos años y reír hasta que duele el estómago tras ver una caricatura graciosa. Y no hay nada mejor que simplemente conformarnos con las cosas pequeñas y la fé para ser realmente felices... Deséenme suerte con mi cometido...